sábado, 9 de mayo de 2009

como dios


Esta tarde estaba trabajando con mi maquina, moviendo tierra, como es mi trabajo cuando, de repente vi a un ratoncito que yo lo había cogido con el cazo y que al siguiente viaje lo hubiera enterrado. Él intentaba sobrevivir pero por donde quería subir era imposible, cayó al suelo y yo me puse a pensar en esa gente que después de una inundación, después de haber perdido su casa lucha por salir vivo del hecatombe,
Para mí sólo era un ratoncito de campo, pero igual en otra vida fue un cesar de Roma o un faraón de Egipto y ahora intentaba sobrevivir después de haber perdido su casa mientras yo lo observo con indiferencia. Para mi sólo es un simple ratón de campo, me pregunto si dios nos observa igual, yo no puedo creer que exista un dios benévolo y misericordioso pero si uno que nos observa curioso como quien mira las hormigas en su hormiguero y luego las pisa sin importarle una mierda, total sólo son hormigas.
En cambio yo, tuve un poco de misericordia y espere unos segundos que al pobre ratoncito le diera tiempo de escalar y ponerse a salvo antes de echar el cazo que lo hubiera enterrado vivo
"Dios aprieta pero no ahoga" debió pensar al escaparse por los pelos.

1 comentario:

  1. ¡Que tierno! me recuerdas a mi...yo siempre "misericordiosa" con todos pero de mi..¿quien tiene misericordia? ¡nadie!!El mundo esta loco loco.

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