Con estos artículos sólo intento plasmar mi opinión así como mis experiencias, intento que os hagáis una idea de que en esta vida no hay bueno y malo sólo grises y sobre todo, quisiera que entendierais que son personas, no putas.
Olvidé hablaros de Linda, lo hice a propósito para hacer así una tercera parte, es una chica de Camerún, alta y delgada “ma non troppo”, con un cuerpo estupendo, como una barbie de chocolate, tiene unos ojos marrones muy grandes, una hermosa melena morena (bueno dos), unas marcas en las mejillas que sirven para que lleve escrito en la cara a que tribu pertenecía allá en Camerún y las nalgas más duras que he tocado en mi vida.
Recuerdo que cuando recorres su piel encuentras innumerables cicatrices redondas firma del cigarrillo de algún indeseable, aunque es un tema del que nunca quiere hablar se nota que lo ha pasado muy mal hasta llegar a lo que otras considerarían un infierno, entonces me acuerdo que en Camerún todavía se practica la ablación y pienso que todavía a tenido suerte, pero me pregunto cuantos traumas llevará consigo.
Hace ya años que la conozco, aunque no sabría como definir nuestra relación, más de una vez me ha dicho de quedar fuera del trabajo pero no sé porque nunca hemos concretado una cita, y mira que me hubiera gustado charlar con ella fuera del tugurio donde trabaja.
Supongo que la puedo considerar una amiga, interesada puede que si, pero un hombro donde apoyarme en los momentos difíciles, recuerdo la última vez que estuve con ella, la recuerdo vagamente ya que era muy tarde y ya llevaba mucho alcohol en la sangre, pero recuerdo que me dijo:
-“Siempre que estoy contigo, soy feliz”
Toda una declaración que me dejo sin palabras.
Olvidé hablaros de Linda, lo hice a propósito para hacer así una tercera parte, es una chica de Camerún, alta y delgada “ma non troppo”, con un cuerpo estupendo, como una barbie de chocolate, tiene unos ojos marrones muy grandes, una hermosa melena morena (bueno dos), unas marcas en las mejillas que sirven para que lleve escrito en la cara a que tribu pertenecía allá en Camerún y las nalgas más duras que he tocado en mi vida.
Recuerdo que cuando recorres su piel encuentras innumerables cicatrices redondas firma del cigarrillo de algún indeseable, aunque es un tema del que nunca quiere hablar se nota que lo ha pasado muy mal hasta llegar a lo que otras considerarían un infierno, entonces me acuerdo que en Camerún todavía se practica la ablación y pienso que todavía a tenido suerte, pero me pregunto cuantos traumas llevará consigo.
Hace ya años que la conozco, aunque no sabría como definir nuestra relación, más de una vez me ha dicho de quedar fuera del trabajo pero no sé porque nunca hemos concretado una cita, y mira que me hubiera gustado charlar con ella fuera del tugurio donde trabaja.
Supongo que la puedo considerar una amiga, interesada puede que si, pero un hombro donde apoyarme en los momentos difíciles, recuerdo la última vez que estuve con ella, la recuerdo vagamente ya que era muy tarde y ya llevaba mucho alcohol en la sangre, pero recuerdo que me dijo:
-“Siempre que estoy contigo, soy feliz”
Toda una declaración que me dejo sin palabras.
esta bien tu texto eres muy sincero.
ResponderEliminarque tengas buen fin de semana. besos
¿quieres ver mis dibujos?
están en este blog http://luna-dibujando.blogspot.com/
es solo para que los veas si quieres, no hace falta que comentes :-)
guau...
ResponderEliminarme agrada que las concideres personas...
y no se... me agrado lo que has escrito...
mucho tiempo sin visitarte.
saludos.