Viendo lo bonita que han dejado la plaza imperial Tarraco uno no puede mas que alegrarse pero echa de menos los patos, reconozco que esta más limpia, por lo menos de momento.
Quizás en este mundo puede el higiene y la seguridad a la tradición o a la voluntad del pueblo, aunque viendo que las palomas, se han adueñado de la plaza me pregunto porque ellas si están por encima del higiene y la seguridad.
La cuestión es que esas ratas voladoras que invaden la ciudad han conseguido uno de los pocos bastiones que les faltaban por conquistar de Tarragona.
Supongo que en las ciudades modernas sólo hay sitio para las ratas y las palomas mientras que los demás animales (patos, ponys, etc.) Están condenados a vivir en granjas.
Supongo también que para enseñarles a nuestros hijos que es un pato o un pony tendremos que recurrir al google.
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